Cómo hemos cambiado!!, de las antiguas pizarras que escribían nuestros abuelos con su pizarrín a estas nuevas, pasando por los encerados verdes y llenos de tiza que los vamos jubilando poco a poco.
Los tiempos cambian y tenemos que acercarnos a las nuevas tecnologías ya que son el futuro. Pero hay algo en común con todas esas pizarras, las antiguas y las nuevas, y es que se necesitan a niños, profes que con su esfuerzo las llenen de conocimientos, cuentas, problemas, ideas, ilusiones, trabajos, castigos ...
¡¡Larga vida a la nueva pizarra!!
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